La preparación es clave, y más cuando hablamos de los exámenes de Selectividad 🙏. En algunos artículos anteriores te hemos recomendado métodos de estudio para optimizar tu tiempo y teniendo en cuenta el tiempo de descanso para tu mente.
Para que tengas presentes todos los métodos de estudio, te hemos preparado este artículo para que puedas encontrar la mejor forma de estudiar 💪.
Antes de nada, te avisamos de que no existen fórmulas mágicas para retener más información o aprobar exámenes a último momento 🙅. Todo se basa en la organización, concentración y constancia. No hay más. Lo que sí podemos recomendarte son los siguientes métodos de estudio.
Algunos de ellos quizás ya los has leído por el blog. Igualmente, te recomendamos probarlos todos para ver cuál es el que mejor encaja contigo. Cada estudiante es diferente y es posible que haya algún método en particular que te permita sacarle todo el jugo a las materias 🔥.
Con este método, podemos programar de antemano los descansos para intentar optimizar al máximo la jornada de estudio. Se basa en alternar un tiempo de estudio intensivo de unos 25 minutos con tiempos de descanso de 5 minutos. Cada cuatro tiempos de estudio, es recomendable hacer un descanso más largo (de unos 15-20 minutos aproximadamente).
Existen webs y aplicaciones que te avisan directamente de los tiempos, como si se tratara de una alarma. De esta forma, evitas perder el tiempo revisando el móvil. Durante el descanso, puedes aprovechar para levantarte, ir al baño, tomar agua, echar una partida al Clash Royale 🤓…
Cuando repases los apuntes, trata de relacionar preguntas o conceptos relacionados con esos apuntes en otra hoja 📑. Esto te ayudará a crear mapas mentales y te facilitará el aprendizaje. En dos hojas relacionadas entre sí, tendrás tanto las preguntas como las respuestas.
Es posible que ya hayas usado este método para estudiar Filosofía, pero bueno, ahora te aclaramos el nombre real de la metodología 😅.
Este método es específicamente útil para asignaturas en las que necesites memorizar palabras y conceptos. La idea es relacionar algo familiar con conceptos nuevos. 💭 Por ejemplo, trata de imaginar un trayecto que te resulte familiar (la ruta de camino al instituto, a casa, el mapa de un videojuego…), y después, colocas los conceptos que se quiera recordar como si fueran objetos dentro de este trayecto que hayas elegido.
Puede parecer muy rebuscado, pero si logras “componer” una ruta con conceptos de la materia, te sacarás de encima bastantes contenidos.
Con este método tenemos que poner en práctica los siguientes cinco puntos: explorar, preguntar, leer, recitar y repasar. Importante❗Hay que seguir estos puntos en el orden que te hemos indicado. Con este método lograrás memorizar más fácilmente y asimilar los conceptos básicos de la materia.
A algunos estudiantes les ayuda explicar a otros compañeros el temario en vez de recitarlo por sí solos 🗣. Como te hemos comentado al principio, cada estudiante es diferente, así que prueba cómo te funciona a ti mejor.
De cara a elegir las asignaturas de estudio, te recomendamos preparar bien las comunes de opción. Recuerda que las asignaturas comunes puntúan para la fase general y para la fase específica. Es importante que sean las asignaturas con las que te sientes más cómodo, incluso más que en cualquiera de las obligatorias.
Y por último, trata de elegir las asignaturas que ponderen más (siempre es mejor el 0,2) para sumar el máximo de puntos a la nota final. Dependiendo de la carrera que quieras entrar, las asignaturas que puntúan más serán distintas. Cuanto más relacionadas están con el grado, más puntuarán ⚡.
